NADIE QUIERE SER MI AMIGO
Malaquías es un niño de seis años que acaba de perder a su padre, tiene problemas con su madre por querer pasar más tiempo con Nadie, su amigo imaginario, que, con ella, y cada vez que va con la extraña Doctora Luz —especializada en meterse a las mentes de los niños—, se siente como si entrara a una cámara de tortura. Y todo porque a los demás les parece extraño, y hasta dañino, que prefiera pasar más tiempo con “Nadie” que con la gente que lo rodea. Nadie quiere ser mi amigo está orientada a un público infantil de 5 años en adelante, y aborda el tema de la pérdida de los seres queridos, en este caso en particular del padre, y los conflictos que surgen entre quienes se quedan —la madre y el hijo pequeño de seis años— al no encontrar los canales adecuados para expresar su pesar, pero sobre todo, al no haber una comprensión mutua, ya que por un lado está la madre, atrapada en la cotidianidad del trabajo, lo que no le permite pasar mucho tiempo con su hijo; y por el otro Malaquías, un niño de seis años, quien en su enojo contra la madre por creerla responsable de la muerte del padre, se refugia en la invención de un amigo imaginario








